miércoles, 26 de marzo de 2014

2014


Hace tiempo que no escribo nada acá...

Ese bocetito es del bloc chiquito. Parece que por ahora dejé los mandalas. Por lo menos los mandalas bastante elaborados.  En algún post habia dicho que los dibujaba como para contener algo... bueno, ahora dejo que eso de desparrame en estos blocs chiquitos, haciendo bocetitos rápidos.

Volví a algo más gráfico, dibujando con microfibra.
Me acuerdo que los primeros dibujos en estos blocs eran en valor, hechos con birome. La birome me permitía hacer cosas bastante sutiles. Después me encontré con que era muy complejo llevar eso a la pintura de caballete, requería mucha precisión.
Éstos bocetitos me parece que son más aprovechables. Y me permiten sacarme más cosas de la cabeza. En gran parte son lineales, con la línea se dibuja más rápido que en valor. Así que van saliendo, me sirven para vaciar la cabeza.

Este en particular venía de que otra vez soñé con el juego. Pero la imagen no es del sueño. En el sueño la piezas eran kenes y barbies. Unos amontonados a un costado del tablero y otros formando un cuadrado en el centro. La imagen viene de otra cosa, de algo que leí en un libro de astrología, un libro sobre la casa 12. Decía que los que tienen a Saturno en casa 12 deberían trabajar con madera, piedras y cuero. No sé por qué serán esos... yo creía que era el plomo nomás. Hace un tiempo había pensado en eso, que esos deberían ser los materiales del juego. Pero yo lo relacionaba más con los indios, con algo bien primitivo.

Otra cosa que leí es que la casa 5 está relacionada con el juego. Eso explica bastante sobre esta obsesión. es la relación entre la casa 5 y la 12.

Estoy un poco harto de soñar obras copadas. No sé, sería mejor hacerlas...
Después soñé con una araña que era una especie de joya, de metal verde con una piedra roja luminosa en el centro. Es por no pintar, no creo que haya mucho más significado que eso ahí.

Y...

Todo el año pasado escribí mucho, tengo una pila de cuadernos. Estuve todo el año pensando en cómo concretar algo. O más, desde hace un año y medio. Me parece que ahora ya lo decidí. Pero es interesante como fue el proceso. Lo que pasó fue que me venían obsesiones ¿No? y me ponía a escribir sobre eso. Ponele medio cuaderno sobre algo con lo que me entusiasmaba. Y después se me pasaba... y me ponía a escribir sobre otra cosa. Me parece que no estuvo mal...
Pienso que de no haberlo anotado todo hubiesen sido un montón de meses perdidos. Estoy seguro de que a mucha gente le pasa. Pasa el tiempo y no hicieron nada. En cambio recopilar todo lo que aparece está bien, es productivo. Lo digo porque tiene muy mala fama el pensamiento, ha como toda una pelotudés zen, o taoísta... y el otro extremo es más de autoayuda ¿No? Definir objetivos, planificar proyectos...
Me parece que anotar todo es como las dos cosas juntas. Está el entregarse uno a lo que va saliendo y están los objetivos y proyectos. Muchos objetivos, muchos proyectos, todo en un gran caos. No está mal. Me parece que los mandalas eran para contener eso, toda esa frustración y el entusiasmo en el aire.
Jung siempre habla de los opuestos cuando explica los mandalas, dice que frente al peligro de disociación en los pares de opuestos el mandala protege. Y acá los opuestos serían la frustración y el entusiasmo, y además los proyectos y objetivos diversos, opuestos entre sí, incompatibles. Porque si me hubiese dejado llevar por la frustración no hacía nada, me hubiese deprimido. En cambio si me dejaba llevar por el entusiasmó hubiese hecho alguna pelotudés. En cambio insistí en recopilar lo que se me iba ocurriendo. Bueno, eso también tiene que ver con los mandalas.

La Yoko Ono del surrealismo

Creo que todavía queda algo en el surrealismo. Estoy leyendo biografías. De André Breton, de Salvador Dalí, de Gala. En la vida de las figur...