martes, 31 de mayo de 2011

Miguel Hachen VS Paredones Muralismo

Fíjense esta pelea:


Este pintor (Miguel Hachen) se queja de que le robaron el estilo:


Según Miguel Hachen  Lucas Quinto le "robó" el estilo :


Lo sorprendente es todo lo que escribe Miguel Hachen en su blog:


La globalización del plagio y los piratas del arte


Los corsarios virtuales
Gracias a internet y sus redes sociales la comunicación actual es instantánea y el acceso a la información es inmediato. Con un simple “clic” es posible introducirnos en la vida y la obra de otros artistas, contemporáneos o no. Hay que estar muy atentos porque, si por un lado la web nos permite divulgar nuestras obras, por otro lado facilita el pirateo de trabajos, ideas, conceptos, textos, denominaciones, estilos, frases, etc.
Considerando que este medio da una falsa sensación de anonimato, los corsarios del arte actúan impunemente y, como si fuera poco, son tan sinvergüenzas que luego publican en sus redes sociales el producto o subproducto de sus saqueos. Si navegamos la web y ponemos un poco atención podremos ver millares de ejemplos. Gente que posta en su Blog y publica en su Facebook copias o directamente trabajos ajenos, incluso de pintores, escritores y músicos consagrados, sin que jamás citen la fuente.
Cantando con la voz ajena
Así vemos que un Josecito González publica y se atribuye un hermoso poema… de Silvio Rodríguez! Pedrito copia a Romero Brito y publica sus plagios; fulanita “recrea” la figura central de mi obra Mural “Ka’agüi sy ha nhande tekoha” y la publica en su blog.
Otros, más creativos pero no menos piratas, se apropian de los lenguajes plásticos.
Al carecer de voz propia se adueñan de voces ajenas para lograr expresarse, pero quien tiene el oído y la mirada afinados sabrá notar quien es un mero imitador. Hay quienes imitan a Joaquín Sabina, pero lo hacen conscientes, sin la intención de engañar al público diciéndoles que es autor, compositor y dueño de esa voz. En artes plásticas están los falsificadores profesionales de obras maestras de autores consagrados y los imitadores que se suben a cualquier tema y autor que se destaque del resto. Cuando Botero está de moda, lo imitan, si Carpani hubiese sido boliviano o venezolano (lo ideal para el que plagia ideas es que el plagiado viva lejos), lo hubieran copiado e imitado, sin citarlo. Es vergonzoso. Otros aseguran que hacen “arte indígena” y su trabajo consiste en copiar de la web el arte originario y plasmarlo literalmente, sin tener la capacidad de, al menos, recrearlo.
Las metáforas sobre el Quinto y otros tantos Paredones
En mi caso, no siendo un artista consagrado; aunque no me sorprende, me indigna que a falta de ideas e identidad cultural propias se apele a la piratería, a la imitación del lenguaje plástico y forma de expresión que vengo desarrollando hace 15 años. Me avergüenza que haya colegas que muy audaz y ligeramente se atribuyan el “estilo” Neoguaraní para designar a sus performances y otros, no menos audaces, que al cuarto o Quinto día (de un día para el otro) mágicamente conciben un lenguaje, tomando para sí la idea de introducir elementos gráficos en las figuras humanas, forma propia que introduje en 1.996 para resemantizar la pintura corporal de los guaranís. Si bien es cierto que las grafías son de dominio público, pero no así su forma de aplicar.
Me fastidia y me asombra que a cambio de aplausos y elogios se usurpe las ideas ajenas y peor aún porque los piratas sean artistas que por un lado pregonan la sociabilización del arte, pero por otro lado, ante la incapacidad de crear y tener ideas propias, roban, globalizando el plagio.
Los conquistadores virtuales: el muerto se asusta del degollado
Es irónico que aquellos artistas que en sus obras y discursos critican y condenan a los colonizadores, a las multinacionales y a los explotadores de turno por usurpar los bienes materiales y culturales ajenos, actúen de la misma manera que aquellos que critican (sic”). Es decir que ganan notoriedad, poder y prestigio gracias al trabajo y al esfuerzo ajeno. Viéndolos actuar así me siento el propio Túpac frente a los bestiales y hoy virtuales conquistadores que, lápiz, pincel e internet en mano (léase espada, porque hieren y matan) me despojan de mis ideas. Cuando se procede de la forma que se critica se es hipócrita; más popularmente se diría que esa actitud es como escupir para arriba: el propio escupitajo caerá en la cara de quien escupe.
Muchos colegas buscan con obstinación el bullicio de la notoriedad y la ética, que es más salubre, se apoca delante del ansia por la fama. De ahí mi indignación ante el gesto de usurpar y plagiar sin el menor respeto por el trabajo y la trayectoria ajena. En mi caso, como no me falta creatividad ni ética, no me apropié del trabajo ni de la denominación dada por otros a su lenguaje, no me subí a lo que se puso de moda en internet ni me monté en la originalidad o el esfuerzo ajeno para apropiarme de él ni para granjearme reconocimiento u elogios.
Ética y estética
El lenguaje Neoguaraní revela y encarna muchos años de trabajo e investigación seria, se trata de concepto que entraña una forma de pensar y de hacer, como también es una manera conducirse y actuar éticamente, con un poco de dignidad y respeto por la cultura que venero. Ellos, los guaraníes hacían y hacen su arte y aunque yo le otorgue nuevos significados a sus códigos visuales creando frescas alegorías, lo hago citándolos, dándoles a ellos los créditos y el prestigio porque soy consciente de que mi trabajo emana de sus manantiales (ver Manifiesto Neoguaraní). Se trata de una forma de expresión propia que exprime y resemantiza mis raíces culturales y me identifica como ser cultural; un lenguaje que emana de una forma de ver y sentir mi entorno y que, cual si fuese sangre, circula por mis venas.
De mis vivencias nacieron la concepción estética y los recursos compositivos, el modo personal de generar espacios y profundidad; la manera de aplicar las formas y los colores. El particular estilo para crear y recrear imágenes en el que las figuras y el fondo juegan entre sí, creando nuevas figuras. Nada de ello me fue dado gratuitamente, trabajé muchos años y aún lo sigo haciendo. Lo hago con mucho respeto por el arte y, por sobre todo, inspirado en este milenario pueblo guaraní al que interpreto con cierta timidez pero con mucha veneración. No fue necesario robar ideas ni conceptos ajenos.
Tal vez mi única virtud haya sido indagar y buscar muy dentro de mí, en mis propias raíces y vivencias cuando era gurí en la selva misionera. Allí, en ese infinito espacio, donde habité hasta los diez años y donde intercambiaba juegos, pesca, caza y tropelías con mis vecinos los Mbyá Guaraní.
La aceptación popular o el rechazo son menos vitales que mi propia investigación, que mis tímidos hallazgos. Para mí el ruido de la notoriedad se apoca ante la salubridad de una misión en la vida, de una búsqueda constante. Si soy limitado en mi saber, suelo ser auténtico y respetuoso en el hacer y en el decir y más respetuoso aún de las ideas ajenas.
De los 30 años que llevo gastando lápices y pinceles emanaron la concepción estética y los recursos compositivos, el modo primitivo de generar espacios y profundidad; la manera de aplicar las formas y los colores. El particular estilo de crear imágenes en el que las figuras y el fondo juegan entre sí creando nuevas figuras, no me fueron dados gratuitamente. Trabajé muchos años para ello y lo sigo haciendo. Lo hago con mucho respeto por el arte y, por sobre todo, inspirado en este milenario pueblo al que interpreto con cierta timidez pero con mucha veneración.
Al César lo que es del César…
La propiedad intelectual es un bien, la creación también es una riqueza que debemos aprender a respetar. No todos los contenidos de internet son patrimonios universales que se puedan usar libre e irresponsablemente. Siendo así, cuando extraigamos alguna información, imagen o vocablo que nos interese, cuando realicemos relecturas de obras ajenas lo mínimo que debemos hacer es comunicarnos con el autor y consultarlo, en caso de obtener autorización de uso, darle el crédito a quien corresponda. Al igual que los conquistadores, el que plagia lleva las de ganar pero cosecha odio. Tal vez la única ventaja del plagiado sea la de tener conciencia de que su trabajo tiene tantas cualidades que merece ser imitado. Habría que intentar ponerse en la piel de los otros, preguntarse cómo se sentirían cuando se apropian de sus ideas.
Tal vez esta reflexión sea útil y comencemos por abolir la piratería por lo menos en los ámbitos culturales, donde jóvenes artistas podrían dar el ejemplo. Está muy bien retratar la historia en muros y paredones para condenar a los imperialistas de turno, pero, reitero, habría que tener el cuidado de no remedarlos.
Creo que todos los artistas, a través del esfuerzo y del trabajo pueden ser capaces de desarrollar un lenguaje de expresión artística propio, un modo particular de exprimir lo que se es y se siente y que, con el tiempo, todos puedan aprender a hablar con el sonido de su propia voz. Es decir, expresar aquello que es como individuo.
La diversidad es sana; lo ideal es que Pedrito sea Pedrito, Carlitos sea Carlitos y que no intenten ser quienes no son. De todos modos historia se va a encargar de contar la verdad y desenmascarar a los corsarios que hoy navegan y piratean en los mares de la web. Al lado de los piratas modernos Morgan sería un mero aprendiz: él no tenía computador a bordo!
Miguel Hachen

Y esto le responden en facebook (yo había comentado cuando lo publicó en su blog pero censuró mi comentario):
  • Paredones Muralismo 
    te cuento que otra vez nos agredis sin conocernos, la primera te la contestamos sin agredirte por que respetamos tu trabajo, nosotros no negamos ni quienes somos ni de donde venimos, las guardas que usamos responden a nuestra busqueda estetica, son mapuches, por por otro lado Carpani fue maestro nuestro,tu busqueda nos parece maravillosa , admiramos tu obra , no somos artistas si no obreros del arte, peleamos por un arte para todos y respetamos todas las busquedas esteticas, asi como admiramos profundamente a las brigadas Ramona Parra y no le robamos su forma de resolver la imaen a vos tambien te respetamos pero jamas te robamos nada, estaria muy bueno que en un futuro podamos trabajar juntos en alguna pared donde vos seas vos y nosotros seamos nosotros, ya que aunque no lo creas esta es la forma en que nosotros trabajamos si miras bien nuestros trabajos ccada uno de nuestros integrantes tiene su propia estetica, nadie impone nada cada uno aporta desde su propia identidad, nos ofende profundamente y nos duele que nos acuses de algo, que no somos, Saludos y esperamos todos los integrantes de Paredon y Despues que en un futuro podamos trabajar juntos venciendo las diferencias... Saludos Lucas Quinto de Paredon Y despues

    14 de mayo a las 11:46 ·  5 personas

  • Cristina Carballo a los matanceros nos gustarìa ver un mural de Miguel en una pared de una de nuestras escuelas, o en algùn centro comunitario, o en una villa, apoyando a la familia de Luciano Arruga, o justicia por el asesinato de Carlos Fuentealba, .
    14 de mayo a las 19:44 ·  2 personas

  • Cristina Carballo De verdad nos gustaría ver mucho más del arte como instrumento de lucha ! POR AHORA Y AFORTUNADAMENTE vemos a Lucas y a Paredones !
    14 de mayo a las 19:46 ·  4 personas

  • Paredones Muralismo Gracias a todos quienes se juegan por nosotros y nos apoyan frente a quienes cobardemente nos difaman...
    15 de mayo a las 21:46 ·  2 personas

  • El Tabano Marechal en la matanza conocemos los caminos llenos de piedras de paredon y su etica de laburo, no son simples artistas, son compañeros en la militancia del trabajo cotidiano. saludos "al Quinto y a otros tantos paredones"
    17 de mayo a las 13:48 ·  1 persona

  • Kondor Vuela 
    en el arte ya nadie es capaz de inventar nada nuevo, la tecnologia de hoy hace mas evidente esa certeza, cuando nos damos cuenta de esto, algunos preferimos pensar que otros estan por una busqueda similar, y otros que les roban sus ideas,la ultima es un pensamiento bastante basico y mas aun hoy, de un ombliguismo importante. el grupo paredon y despues somos: , Valeria Orfino, Miriam Ibrahim, Patricia Ochiuzzi y Lucas Quinto Y quien escribe, Sergio Condori

    17 de mayo a las 14:03

  • Valeria Orfino 
    Hola Miguel, me sorprende y me apena en cierto sentido, que este tipo de discusiones (totalmente validas), se vean motivadas por la bronca, la mala interpretacion y sobre todo por la desinformacion, una paradoja interesante tratandonos de este medio. Nosotros tenemos una busqueda estetica y tambien basamos nuestro trabajo y nuestras acciones en una etica que nos permite construir colectivamente. Este costituye un constante desafio, ya que estamos en un mundo que nos fracciona y nos impone la mirada individual como un valor deseable al que todos deberiamos aspirar... Paredon y Despues intenta y trabaja con la conviccion de querer generar una alternativa a esta mirada. nosotros como grupo, estamos en la busqueda de una identidad comun que nos trascienda,es dinamico. Aportamos esta herramienta del mural para hermanarnos con las causas justas de nuestro entorno y para sumar a aquellos que prefieren caminar juntos en ese sentido. Esperamos tener alguna oportunidad para conocernos "realmente" y hacer de estos debates una verdadera reflexion constructiva. saludos, Valeria Orfino de Paredon y Despues.

    17 de mayo a las 15:54 ·  4 personas

  • Alejandra Cabrera 
    queria decir algo al respecto de lo escrito por este tal Miguel Hachen, aclaro que no sy artista ni sé de arte(estoy aprendiendo) pero conozco (y sigo conociendo) a la gente de PAREDON a ese tal QUINTO,esta de mas decir que es una excelentepersona y digo que el comentario de MIguel se llama ENVIDIA, totalmente ! cualquier persona con sentido comun sé dá cuenta que es asi.no entiendo que clase de artista se denomina si copia de otros(x mas que diga y cite lo hace) y la CREATIVIDAD DEL ARTISTA???? donde esta????? con esto no quiero agredir a nadie, solo pregunto y lo que me parece.... empecemos a respetar para ser respetados!!! saludos a todos los de PAREDON!!!!! sigan asi !!!!!! besos!!!!! (solo una opinion)

    17 de mayo a las 21:13 ·  1 persona

  • Cristina Carballo che, paren un poco ,si hay que reconocerle algo a Miguel es que es màs elegante que ustedes, ! NI UNA MANCHITA CUANDO PINTA !
    17 de mayo a las 21:54 ·  1 persona

  • Paredones Muralismo es cierto Cristina se lo ve mas limpio que a nosotros...
    18 de mayo a las 17:21

  • Jennifer Díaz ke pena por Miguel Hachen es un weon agrandao .. si bien su trabajo es bueno la soberbia de sus palabras solo lo hacen parecer un tipo ignorante ....
    sigan haciendo el excelente trabajo ke realizan paredones ...desde Chile un gran saludo !!!!!!

    18 de mayo a las 18:30 ·  2 personas

  • Jose Cieri no estoy de acuerdo, los artistas ,como los filosofos, no tienen el conocimiento ,estan en la eterna buqueda , si hay gente que jode, pero ellos, se decantan solos ,nadie tiene la verdad, y la tecnologia y la reproduccion ,hizo llegar a la gente comun ,que no estas encerrada en los claustos acacdemicos ,imagenes y esta ,pudo apreciar y extasiarse con la bellezaaaaaa....
    18 de mayo a las 19:43 ·  1 persona

  • Carlos Mainini Che Hachen el dia que dejes la "elite" artistica metas las patas en el barro y te veamos pintar con los pibes una pared destartalada sacando arte de lugares que parecen imposibles en alguna escuelita de las mas pobres del conurbano como hace Paredon vas a tener derecho a criticar
    22 de mayo a las 10:46 ·  1 persona

  • Jose Cieri que grande algunos , trendrian que investigar de quien hablan , mamani compañero de la marechall , invitado a bolivia , venezuela, y otros paises con recorrido importante y aun pintando en escuelas , donde sus obras son pedazos de raices de nuestra cultura....
    22 de mayo a las 10:56 ·  2 personas

  • Patricia Occhiuzzi La verdad, que duele ver con que liviandad se difama a las personas por estos medios, sin permitirse la posibilidad de conocerlos
    23 de mayo a las 1:11

  • Myriam Ibrahim En nombre de Paredon, gracias a todos por vuestra participacion a, lo q un tal Hachen, llamó en un momento "reflexión y discusión"...."Ladran Quinto,señal q vamos caminando!!"
    24 de mayo a las 0:49 ·  1 persona

  • Natalia Negra 
    Lu cuantos años tenias cuando pintaste el mural de la Càrcova? Carpani estaba ahí, en el mismo momento en que pintabas, se sintió plagiado o dijo que eras bueno, qué fuiste un buen alumno? yo vengo viendo la magia de tu proceso desde que te conozco, o sea 32 años, veía las caras pasmadas de la gente cuando a los 12 años hacías los guerreros, ponías imagen a los personajes de los libros, así potentes como un sopapo a la mañana y construías las lanzas para los juegos, vi los laburos de Miguel, me gustaron, no encuentro el parecido, para nada. Miguel dice que hace 15 años tiene esta estética y se parece a la tuya pues entonces te robo, Y seria bueno que Miguel con lo culto que se muestra y lo entendido en ciertos temas pudiera diferenciar una guarda MAPUCHE de una GUARANI. Pero yo ya descubrí que están los Laburantes y los artistas, vos Lucas sos un laburante por eso podes pintar lo metalúrgico del día , lo jornalero sin tener que hacer un estudio antropológico, No sos el Cesar claro esta, sos un simple laburante, un obrero, un eslabón màs en la tarea de la lucha. Y Paredones es un colectivo de eso, LABURANTES, que juntos impresionan. Saludos.

    Hace 8 horas ·  3 personas

  • Lucas Quinto ese mural que vos mensionas lo pinte a los 18 años , la mitad de mi vida, y si estaba ahi Carpani por que el curso lo dio el, y como vos desis somos un colectivo de laburantes no de artistas, los egos individualistas no nos motivan , solo el trabajo, los compañeros y los ideales que siguen firmes
    Hace 51 minutos

lunes, 30 de mayo de 2011

¿Que significa la obra?





Por separado no me gustaban esos bocetitos del bloc. Pero lo que armé combinándolos me va a servir para algo... 
Tiene un aire a Quetzalcóatl:


Bueno, así funciona el proceso creativo...
A veces la gente que me ve pintando en la calle me pregunta "que significa" lo que estoy pintando. Es una pregunta que me complica mucho. No tanto por no saber que significa. Sino porque son cosas muy íntimas.
Yo creo que esas cosas son para hablarlas con tu psicoanalista, no con cualquier desconocido que te encuentre en la calle. En general los artistas públicos no tienen problemas para hablar del significado de su obra, pero creo que es porque no se analizan. Para mi interpretar una obra es como interpretar un sueño.
Hoy releyendo el primer tomo de "Los tipos psicológicos" de Jung encontré esto que había subrayado:

"Este es el fin y el origen del símbolo, que al absorber del objeto determinada dosis de libido le desvaloriza relativamente, otorgando así una plusvalía al sujeto. Ahora bien, esta plusvalía atañe al inconsciente del sujeto, pues este queda situado entre una determinante exterior y otra interior, originándose la posibilidad de elección y la libertad relativa del sujeto mismo."
 (p. 317 Editorial Sudamericana)

Antes de ponerme a hablar de lo que significa mi obra tendría que aclarar que no se trata de un signo, que es un símbolo. Y explicar para que sirve. Eso es lo importante, y lo que me gustaría comunicar.


¿Pero de que manera? Y más urgente... ¿Se entiende lo que digo?

domingo, 29 de mayo de 2011

Discusión en facebook sobre arteBA

Cuando escribo en este blog generalmente es sobre lo que voy pintando. Sin dar demasiadas vueltas y disfrutándolo. Pero cuando me encuentro con artistas plásticos opinando a veces pierdo la paciencia.. La gente que se junta a quejarse me exaspera...
En facebook un artista plástico compartió esta nota de página12 :

"EL ARTE, HOY


 Por Marcos Zimmermann
En uno de los más bellos textos que se hayan escrito sobre la conquista del Río de la Plata y, sin duda, el primer retrato de cómo el imaginario europeo se superpuso desde el principio a la realidad de nuestro territorio, Ulrico Schmidl cuenta que a mediados del siglo XVI llegó a un pueblo situado en alguna parte imprecisa de lo que hoy es el Litoral argentino, en el cual yacarés gigantes escupían fuego por la boca y serpientes colosales se alimentaban de aborígenes. Asegura este marino alemán, integrante de la expedición de Pedro de Mendoza, que en esa oportunidad mató, junto a Ayolas y a otros conquistadores, a millares de aquellas bestias malévolas con su sola carabina.
Es obvio que Ulrico nunca vivió semejante Guerra Animal. Nuestros extraordinarios yacarés jamás tuvieron tales virtudes dragonianas, ni las serpientes superaron aquí a la ya inmensa boa curiyú que no llega a los dos metros y que habita todavía hoy los bañados del Gran Chaco. Pero, ¿qué importa su imprecisión, su exceso o, si se quiere, su descarada mentira? Al fin y al cabo, ¿no explica la desproporción de su relato la exacta dimensión de su espanto frente al territorio inmenso al que se enfrentaba y que le resultaba inasible a su mirada, hostil a su conocimiento y estéril a su deseo oculto de riqueza? ¿Acaso no era entonces nuestra tierra sólo un dibujo impreciso en las cartas náuticas de unos pocos marinos arrojados, donde se escondía el supuesto imperio de un Rey Blanco y una Ciudad de los Césares cuya construcción imaginaria provino de la extrapolación errónea, a un territorio del apellido del primer expedicionario que lo había descubierto, llamado Francisco César?
Traigo a colación este relato histórico, que a primera vista parece tener poco que ver con el arte, porque creo que hay algo de esta necesaria desmesura de Schmidl en el trabajo y en el modo de hacer de todo artista. Es que el arte suele anidar sigiloso en el corazón, del mismo modo en que un soldado se acurrucaba en la trinchera frente al horror de la batalla. Desde allí es de donde se expresa. A veces, con el silencio propio del alma, a veces con un grito explosivo, heroico o incluso blasfemo. Pero sea cual fuere el motivo de su génesis, lo cierto es que la naturaleza sensible de una obra de arte escapa a cualquier medición exacta y a toda explicación acabada. Su exégesis se resuelve en el corazón ardiente de quien necesita expresar lo inexplicable, y su idioma sobrepasa todo discurso preciso. En ese espacio interior del arte, tan desmedido como la tierra que enfrentaba Schmidl y tan arduo de contar como le resultaba al marino, está el origen de su lenguaje y la semilla de todo el resto. Ideas, maneras, formas o estilos concretos se cocinan en ese fuego primero. Y aunque el artista sea fiel a su tiempo, lo que deja es siempre anterior o posterior a su conciencia. La verdad de su obra resuella en ese aliento impreciso. La belleza y la fealdad palpitan en esa matriz sensitiva. Y así anda, la mayoría de las veces, el pobre artista, poniendo en su obra su excesiva alegría o su infinita tristeza, con un lenguaje muchas veces incomprensible para el resto, como un hijastro montaraz del mundo.
En la otra punta está el mercado, el orden, las jerarquías y el dinero siempre necesario. Cosas todas que son, en realidad, ajenas al arte, y demasiado estrictas para evaluar sus méritos espirituales. Allí no importa lo sensible. De lo que se trata es de oportunidades, de inversiones, de precio y de fanfarria. Así, los mecenas contemporáneos imponen sus estilos de vida e infligen al arte los exactos modelos ideológicos de las sociedades siempre mullidas a las que pertenecen. Hasta el mismo arte trabaja muchas veces arduamente para mimetizarse con esos modelos, para que esa osmosis de “pertenencia a un mismo club” se reproduzca casi sola, aunque incluya cada tanto alguna transgresión pequeña, claro, siempre bienvenida.
Flota en el aire una idea que no tiene aún su correlato con la realidad: sería bueno que los artistas pudiéramos generar en esto algún cambio, como lo han hecho otros actores, en otros ámbitos del país. Para hacer que las ferias de arte dejaran de ser espacios que ocupan sólo quienes controlan el marketing y no comprenden guerras como las de Schmidl, y se conviertan en foros de discusión e intercambio de una infinidad de cosas que desvelan de verdad a los artistas. Porque la vida en el arte no es nunca un sitio complaciente. Y si en este siglo XXI hemos visto cómo caen las caretas de muchas “verdades incontestables” del mundo junto con sus protagonistas, en la Argentina, donde por suerte ya sabemos bastante sobre el tema, debería surgir pronto un nuevo tiempo en el que sean los artistas, y no solamente los gestores del mercado, quienes juzguen y pongan valor a las obras de arte." 

La discusión:
    • 4 personas les gusta esto.

      • Alba Tirado Impecable,magnifico....
        El jueves a las 16:49 ·  ·  1 persona

      • Fer Franchetti ‎"Magnifico" fue la misma palabra que se me ocurrió, y no es tan común, vaya coincidencia.
        El jueves a las 19:29 ·  ·  1 persona

      • Marcelo Rizzo Es que la analogía del explorador de nuevos mundos es asombrosa! La licencia poética será siempre una forma de dar cuenta de lo incognosible!
        El jueves a las 19:38 · 

      • Catriel Torres ¿Otro más enojado por la bolsa esa? Ya me está empezando a gustar la obra ganadora del Premio Petrobras...
        El Viernes a las 10:14 · 

      • Catriel Torres ¿Además saben porque gana una obra así? Porque está pensada para que los boludos se quejen. Y funciona.
        El Viernes a las 10:35 · 

      • Marcelo Rizzo 
        Catriel, no creo que sea buen negocio que los boludos se quejen, nadie invierte para eso. por chico que sea el kiosko.Todo lo contrario el circo es bueno para que la plebe siga rumiando atónita antes de ir al matadero. Otra cosa es que opinen como vos o yo. No me interesa juzgar a ningún jurado ni a ningún premio. Me refiero a algo más abstracto que personas ( artistas, mercaderes, etc) obras (pinturas, instalaciones, mostradores, vidrieras) Simplemente digo que hay un clivaje entre el arte y las metáforas del poder. Es una premisa antropológica, a partir de la cual lo artístico sería excepcional en la nueva Roma. Las élites también tienen sus circos pequeñitos y más aún en este país que cree que la cultura se puede importar o dirigir. Un saludo

        El Viernes a las 11:00 · 

      • Catriel Torres Claro que las quejas no son el negocio, pero pero prueban que la obra es trasgresora.
        El Viernes a las 11:21 · 

      • Catriel Torres Además en la nota el periodista dice que Arte BA debería ser un espacio para el debate ¿Devatir que? Si nunca nadie dice nada, no tienen nada que decir ¿Cuantos blogs de artistas plásticos conocés? Blogs en los que digan cosas, que se actualicen regularmente. Yo como mucho conozco ,quizás, 5.
        El Viernes a las 11:25 · 

      • Marcelo Rizzo 
        Eh Catriel hay mucho para decir, los mercados tradicionales (que no tenían como mercancía arte) fueron siempre ocasión para otros intercambios. No estaría nada mal abrir uno frente o variosfrentes alternativos . Los artistas también somo hablantes. Claro, coincido con vos que en muchos casos sería pedir peras al olmo: aquellos que se han acomodado a que la imagen es todo y entonces reflexión cero, bueno de esos mejor prescindir. Yo debato todo el tiempo, en la web , en el taller, en las muestras, pero obviamente no es suficiente,. No me dá el tiempo para más y es cierto que muchos se movilizan para hacer autobombo y coaliciones con los que cortan el bacalao. Si querés pasame esos blogs. Ah. fundamental la transgresión si es provocación creativa , pero "per se" no es necesariamente artística o si? otro buen tema para tratar. Como ves temas de debate sobran y ni hablar de la estela de exclusiones y componendas que dejan los Salones oficiales ufff ...

        El Viernes a las 21:10 · 




La Yoko Ono del surrealismo

Creo que todavía queda algo en el surrealismo. Estoy leyendo biografías. De André Breton, de Salvador Dalí, de Gala. En la vida de las figur...